Disminuir el número de acciones sin modificar el capital social.
En la entrada anterior hablamos sobre lo que es un split y las razones que llevan a una empresa a querer que sus acciones bajen de precio, vimos que era una operación necesaria para dar liquidez a un valor cuando su precio era excesivamente elevado y posibilitaba que nuevos inversores entren en su capital.
La operación contraria a un split es un contrasplit. Lo que hace un contrasplit es totalmente lo opuesto: divide el capital social existente entre menos acciones de las que existen en un principio, es decir el número de acciones se divide entre un número acordado en la junta de accionistas manteniendo el capital social invariable. Lo que se consigue con esto es que el precio de la acción aumente inmediatamente: como la empresa vale lo mismo y el número de acciones disminuye el valor de estas aumenta. Se suele realizar en compañías que han sufrido una caída muy fuerte y prolongada lo que ha dejado el valor de sus acciones en un precio muy pequeño, muchas veces hablamos de céntimos. Al realizar un contrasplit se dan una serie de consecuencias.
Cambios en la negociación (Positiva): Al aumentar el precio de una acción disminuye considerablemente su volatilidad. Si una acción vale 0,02€ cada céntimo que su mueva arriba o abajo supone una variación del 50%, esto hace que sean muy peligrosas porque los inversores pueden perder la mitad de su inversión en un momento el riesgo en acciones de tan bajo precio es muy grande. Y al presentar tan grandes variaciones en porcentaje se convierten en acciones altamente manipulables por las manos fuertes que pueden barrer posiciones para ganar un porcentaje muy alto en poco tiempo. Si se realiza un contrasplit de ratio 100:1 la acción pasa a valer 2,00€ y cada variación en el precio no supone tanto porcentaje.
Cambios percepsicón psicológica (Positiva): Las acciones con un precio muy bajo pasan directamente al grupo de los chicharros (acciones con muy poco valor y muy volátiles), mucha gente invierte en ellas con la intención de ganar mucho en poco tiempo y salir corriendo. Digamos que no son acciones “serias” en la que se fijen los grandes fondos por lo que la estabilidad en su accionariado es menor. El aumentar su precio a 2,00€ o a 20,00€ psicológicamente da más valor a la empresa. Sabemos que la empresa vale lo mismo porque el número de acciones es menor pero el precio de la acción ejerce influencia en la mente de la masa inversora. Tiene más “empaque” una acción a 20,00€ que a 0,02€.
Posibilidad de prolongar la caída (Negativa): Cuando una acción cotiza a unos precios tan bajos es porque, normalmente, la acción ha sufrido una caída muy prolongada a lo largo del tiempo provocada por los malos resultados y la mala perspectiva, al aumentar su precio se puede dar pie a que la caída continúe desde el nuevo punto de partida. Si la acción vale 0,02€ poco más puede caer, el próximo paso es la exclusión de la negociación, pero si subimos el precio a 20,00€ con un contrasplit la caída va a continuar si las perspectivas siguen siendo malas. Según mi punto de vista un contrasplit no lo contemplaria hasta que se vea claramente una mejora de las perspectiva empresarial, si los resultados empiezan a mejorar se tendría que considerar, si se hace un contrasplit con la empresa en una espiral de malas expectativas y resultados puede resultar muy perjudicial ya que su valor va a seguir bajando.
Bankia realizó un contrasplit y lo hizo en el momento en que las estimaciones mejoraban, lo que ayudó a mejorar su negociación, si hubiera seguido como acostumbraba su valor se hubiera hundido todavía más. Son operaciones que no son muy habituales pero que hay que tener en cuenta, ¿A que el otro día viste la acción de Google a 500€ y pensaste que estaba barata? Pues eso, es importante saber en qué consiste.